MEXICO.- Adela Noriega, una de las actrices más emblemáticas de las telenovelas mexicanas, ha estado alejada del ojo público durante más de 15 años
Sin embargo, su nombre volvió a acaparar titulares y tendencias en redes sociales recientemente, tras circular un falso rumor sobre su presunto fallecimiento, el cual fue rápidamente desmentido por la falta de fuentes oficiales.
El resurgimiento del interés por la vida de Noriega también se vio impulsado por declaraciones de la productora de Televisa, Giselle González, quien manifestó su deseo de trabajar con la actriz, lo que alimentó las esperanzas de un posible regreso a la televisión.
Adela Noriega marcó a una generación de televidentes con su participación en telenovelas icónicas como Amor real, El privilegio de amar y Quinceañera. Su última aparición en la pantalla chica fue en 2008, cuando interpretó a Sofía Elizondo en Fuego en la sangre, una historia de amor, abuso y redención que protagonizó junto a Eduardo Yáñez. Desde entonces, la actriz desapareció por completo del medio artístico sin emitir comunicados ni declaraciones, lo que dio paso a una ola de especulaciones.
En 2024, una fotografía tomada en 2009 en Beverly Hills se viralizó en redes sociales como si se tratara de una imagen reciente. En ella, Noriega aparece junto a su hermano. A pesar de ser auténtica, la antigüedad de la imagen dejó claro que no se trataba de una reaparición actual, incrementando el misterio sobre su paradero.
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Con el paso del tiempo, diversas versiones sobre su vida han surgido. El periodista Gustavo Adolfo Infante señaló en 2020 que la actriz reside en la colonia Polanco, en la Ciudad de México. En contraste, la ex Miss Universo Alicia Machado mencionó que Noriega vive en Weston, Florida. También se ha especulado que ha incursionado en el negocio inmobiliario y que posee propiedades tanto en México como en Estados Unidos.
En 2022, el actor Ernesto Laguardia reveló que Televisa intentó sumarla a un especial conmemorativo de Quinceañera, pero los esfuerzos fueron infructuosos, y la actriz prefirió seguir alejada de la televisión y los reflectores.
Los rumores en torno a su retiro han ido desde supuestas enfermedades hasta decisiones religiosas. Sin embargo, lo único cierto es que Adela Noriega ha elegido llevar una vida completamente privada, lejos de los medios de comunicación y el espectáculo.
A pesar de su prolongada ausencia, el cariño del público hacia la actriz se mantiene intacto. Su legado sigue vivo en la memoria de quienes crecieron viendo sus telenovelas, consolidándola como una de las reinas indiscutibles del melodrama mexicano. Mientras los rumores continúan, Adela Noriega permanece como un enigma que, hasta ahora, ha sabido preservar con admirable discreción.
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