Santo Domingo RD.- En los años 90, la estrella de Grease, Olivia Newton-John, se enamoró del camarógrafo Patrick McDermott.
Tras nueve años de relación, una mañana, Patrick decidió salir a dar un paseo. Se trataba de un tour en barco, junto a otras 22 personas, por las costas de California.
Sin embargo, Patrick nunca regresó a casa. Nadie pudo explicar en qué momento desapareció ni qué había sucedido con él. La policía solo pudo concluir que probablemente se había caído al mar.
Desesperada, Olivia no se dio por vencida y contrató a un detective privado. Pero, a pesar de sus esfuerzos, nunca logró encontrarlo. En 2008, fue declarado oficialmente muerto, lo que dejó a Olivia completamente devastada.
No obstante, quien nunca dejó de investigar fue la cadena de televisión NBC. Después de años de indagaciones, descubrieron que, en el momento de su desaparición, Patrick debía 30,000 dólares por la manutención de un hijo que tuvo en una relación anterior.
Además, el hecho de que fuera declarado muerto permitió que su hijo cobrara un seguro de vida de 100,000 dólares. La investigación avanzó tanto que incluso recibieron un fax de Patrick, quien afirmaba estar vivo y pedía que lo dejaran en paz.
En 2017, finalmente localizaron a Patrick, quien había estado viviendo en Sayulita, México, con su nueva pareja.