Madrid, ESPANA.- De semblante sereno y apacible, Francisco Javier García es secretario de Estado de Turismo de República Dominicana, el principal destino de la región caribeña.



-Es la actividad que más divisas genera y la que más inversiones y empleo produce. Es clave y va a más, ya que en 2010, por primera vez, sobrepasamos los cuatro millones de turistas. El 70% de la inversión turística dominicana es española.



-Entonces... ¿no han notado la crisis?



-Yo diría que no nos ha afectado, pues en 2010 la economía dominicana creció casi un ocho por ciento, gracias al turismo.



-¿Dónde está el secreto?



-Creo que le debemos mucho a la inversión privada, que resulta clave para crear nuevos atractivos turísticos y de calidad. En este sentido, España se convierte en nuestro gran aliado, pues el 70 por ciento de las inversiones hoteleras son de capital español, sin olvidar que aerolíneas como Iberia y Air Europa se convierten en el puente fundamental entre República Dominicana y el Viejo Continente.



-Con las cifras a favor, ¿qué retos tiene por delante el sector turístico?



-El objetivo es consolidar esta posición de liderazgo en el Caribe y eso pasa por acertar en la promoción y diversificarla. Hemos abierto nuevas oficinas en Praga y Estados Unidos para trabajar mercados específicos. Además, estamos en la línea de promover la región caribeña como un destino único. Buscamos alianzas con el resto de países vecinos para «vendernos» como uno solo.



-La costa dominicana es una de las más valoradas del mundo. ¿La etiqueta de destino de sol y playa puede suponer un freno a la diversificación de su oferta?



-Nuestras playas son envidiables pero sí es cierto que tenemos otros valores que pasan desapercibidos, como buenos campos de golf o áreas naturales de gran belleza.

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Victor Inoa